Conozca las variaciones que ha presentado el coloso desde el 13 de agosto del 2015. Los datos fueron recopilados de los informes diarios del Instituto Geofísico de la Escuela Politécnica Nacional, los cuales incluyen el estado del volcán en proceso de erupción, el nivel de actividad interna, que varía de bajo a moderado, alto o muy alto. Así también, lo que ocurre en la parte superficial, es decir, fumarolas, columnas de gases, salida de ceniza, explosiones, entre otros eventos.
Las características de la actividad sísmica del volcán Cotopaxi cambiaron de forma notoria a partir de abril del 2015, principalmente, con la ocurrencia diaria de sismos de largo período. Los tremores se presentaron de forma esporádica, desde inicios de año. Apenas cinco desde enero hasta el 4 de junio. Desde esta fecha hasta el 17 de agosto se registraron tremores, que variaron desde 1 al día hasta un pico de 269, el 20 de julio. Pero desde el 18 de agosto hasta fines de septiembre casi desaparecieron (apenas 1). Los sismos volcano-tectónicos se han registrado, sobre todo, durante el mes de septiembre. Todos los eventos se sitúan aproximadamente debajo del cráter del volcán, a profundidades de menos de 12 km, incluso, la mayoría están a menos de 9 km, según los reportes del Geofísico.
Las altas temperaturas internas que experimenta el volcán, desde el 14 de agosto del 2015, han originado que aparezcan fisuras en los glaciares y que desprendan bloques de nieve.
El agua del derretimiento de la nieve ha generado pequeños flujos de lodo y escombros, conocidos como lahares secundarios; son de pequeña magnitud, por lo que se quedan dentro del Parque Nacional Cotopaxi y en la parte alta del mismo volcán. En el informe del 1 de octubre del 2015, del Geofísico, en el que se detallan las observaciones durante el sobrevuelo del 27 de septiembre del 2015, se explica que los valores de las temperaturas están dentro del rango de mediciones realizadas, entre el 2002 y principios del 2015. Aunque se advierte que los valores pudieron verse opacados por la presencia continua de gases y nubosidad durante el sobrevuelo.