Octubre 2019

Un grupo de venezolanos esperan desde las 6:30 en el sector Julio Andrade, del Carchi, para ser llevados al campo a trabajar en cultivos de papa.

No todos corren con suerte. Algunos solo logran trabajar en el campo dos o tres días a la semana.

No todos corren con suerte. Algunos solo logran trabajar en el campo dos o tres días a la semana.

Elirber Barreto, de 20 años, llegó al país el 17 de agosto proveniente del estado Lara, Venezuela. Este era su cuarto día esperando para ser llevado al campo.

Elirber en su primer día de trabajo, cosechando arvejas, en el sector Cuaspud, provincia del Carchi. En su tierra era panadero.

Por una jornada de trabajo en el campo reciben alrededor de USD 11. El pago es semanal.

Eduar Rodríguez, de 34 años, ayuda a recoger escombros en una construcción, en El Juncal, Imbabura. Otros días va al campo.

Eduar y su pareja, Agnedis García, llegaron el 9 de julio al país, junto a su hija. Agnedis no consigue trabajo.

Héctor Rodríguez, de 33 años, trabaja algunos días como albañil, en El Juncal. Otras veces, en el campo. Llegó hace seis meses al país.

No todos corren con suerte. Algunos solo logran trabajar en el campo dos o tres días a la semana.

Rolando Avis, de 45 años, padre de cuatro niños, se dedica al comercio informal en Ibarra, Imbabura. En Venezuela, era camionero.
Fotos: Julio Estrella

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Fotos: Julio Estrella

No todos corren con suerte. Algunos solo logran trabajar en el campo dos o tres días a la semana.