Sebastián Gómez Tilico

Tilico dejo de ser un muñeco
para convertirse en un payaso de carne y hueso


El payaso Tilico llegó a la vida de Sebastián Gómez en forma de muñeco. Cuando el ahora actor profesional tenía 5 años un regalo de su abuela fue el elemento que le cambió -más tarde- la vida cuando ya fuera adulto. El día que llegó el muñeco por primera vez a sus manos no tenía nombre, mas la presencia, la sonrisa amplia, los colores vivos de su vestuario y específicamente las piernas largas que tenía hicieron que a Gómez se le ocurriera ponerle Tilico. Y así fue bautizado. Ese muñeco tan querido estuvo junto al actor hasta sus 15 años, más o menos, recuerda Gómez. Sin embargo nunca se fue.

Los años pasaron, de repente Gómez se encontró dentro de una clase de ingeniería en la Escuela Politécnica Nacional, pero no era lo que le llenaba, no estaba en un sitio que lo apasionara. Un taller de aptitudes le dio como resultado que era bueno para las artes. Alguien le dijo que lo intentara, pero él ni siquiera sabía en dónde se estudiaba eso de las artes.

Ese mismo alguien le dijo que vaya a la Universidad Central, que ahí hay una facultad de artes. Entonces fue. Pasar por el umbral de esa facultad le cambió la vida. La pasión por ese oficio le nació el mismo momento que entró al teatro de ese centro de estudios. "Eso me cambió la vida. Ese momento supe qué quería hacer el resto de mi vida", dice.

Las clases siguieron y una de esas era la de clown y ahí debía crear un personaje. Dar vida a un ser que encaje en ese formato de actuación fue una designación académica y sin tener mucho por pensar, Sebastián encarnó a Tilico. De eso ya 14 años, esa es la edad profesional del payacito; él en realidad tiene alrededor de 20 apareciendo en el cuerpo de Gómez.

Pero este payaso juguetón de zapatos grandes, sombrero de copa y pantalón salta charcos no es el único personaje del actor.

Él encarna también al conocido Capitán Peseta que ha sacado sonrisas al público en programas de televisión como 'No te aburras'. Gómez reconocé que cada uno de sus personajes son parte de él mismo y lo representan de alguna manera. Tilico, dice, es el niño que vive en su forma de ser. De hecho este payacito hace presentaciones para niños y ahí Tilico es uno más.

El actual personaje se parece mucho a ese muñeco de piernas largas. Gómez ha querido que ese recuerdo no se vaya e intenta que su apariencia sea lo más parecida al regalo de la abuelita. Las piernas largas se logran con un pantalón salta charcos y el sombrero de copa siempre luce en su cabeza.

Tilico es un homenaje a su niñez, a los momentos infantiles que regresan al actor cuando lo encarna. Es un homenaje también a su abuelita.

Francisco Moreno. Coordinador

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